MÛZA RUBACKYTE
pianist



28 April 2004 - Opera Theater of Santiago of Chile
RUSIA tuvo un Festival!

Esta fue la pianista lituana Muza Rubackyté, quien interpretó la más espectacular versión del Concierto N° 1 deTchaikovsky de que se tenga recuerdo en mucho tiempo en nuestro medio. El que tal vez sea el más popular de los conciertos para piano y orquesta, tantas veces maltratado con ejecuciones de dudosa calidad, se elevó esta vez en una lectura absolutamente magistral, desbordante de fuerza y carácter, liderada por un teclado decidido en" vigor y secundado por una dúctil batuta, entregada por entero a los dictámenes de la solista.
Bastó sólo oír los emblemáticos sones del comienzo de la obra y los inmediatos compases a caigo del piano para darse cuenta que la Rubackyté se las traía. Y así fue, pues su enfoque ultra energizado fue la permanente tónica de su interpretación, elemento que también hizo suyo el maestro Laño, agregando el factor sorpresa de aplicar notorio freno a ciertos pasajes, provocando así muy oportunos momentos de tensión. Si ya el primer movimiento bastaba para la ovación, las secciones siguientes no vinieron sino a sumar puntos a una versión de total excelencia, a cuyos aplausos la solista debió responder con la inusual entrega de tres encores.
Previo a este memorable momento Stefan Laño había abierto la jornada con la célebre obertura "Gran Pascua Rusa" de Rimsky-Korsakov, en una versión acaso más reposada de las que habitualmente se oyen, valiéndose de ese recurso para ofrecer una visión analítica y enriquecer el mundo de variedades tímbricas que propone su compositor.
Después del intermedio vino un plato fuerte. Se trataba de la Sinfonía N° 10 de Shostakovich, la cual encontró de manos del director invitado a un artista soberano. La extensa y contrastada obra contó con un servicio notable, en el cual las exigencias impuestas por la batuta fueron plenamente encaradas por la Filarmónica.

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Temporada Filarmónica en el Teatro Municipal

El director estadounidense Stefan Laño ya es considerado un experto en música contemporánea, en especial en complicadas óperas. Y además dirige orquestas, compone sinfonías y toca piano con espíritu renacentista. Regresó a nuestra temporada filarmónica para hacer un programa muy similar al del ciclo anterior, con una sinfonía de Shostakovich y un concierto para piano que tocó Muza Rubackyte.
En esta ocasión la excelente pianista tocó el más famoso de los conciertos de Tchai-kowsky y Laño dirigió la poco conocida Sinfonía N° 10 del mismo Shostakovich. Ambas obras alcanzaron un alto nivel artístico.El conocido concierto N° 1 de Tchaikowsky sorprendió por la poco usual fuerza que exhibió la pianista lituana, más propia de versiones de solistas varones. Ella tiene una técnica muy sólida y su interpretación estuvo llena de pasión rusa que resultó sensacional, junto a la estupenda Filarmónica muy bien guiada por Stefan Laño. Pero lo más importante estuvo en la Décima Sinfonía, que es quizás la mejor de las 15 que compuso.
Con batuta clara y maestría total Laño supo transmitir el mundo amargo que subyace en cada uno de los cuatro movimientos y el público premió su conducción y el magnífico desempeño de los vientos y cuerdas de la Orquesta Filarmónica con una ovación extraordinaria.
El Mercurion 28 April 2004